La luz se colaba por sus párpados cerrados.
《Tengo que comprar cortinas más oscuras》
Abrió los ojos con pesadez, y un dolor punzante en su cabeza no la dejó mover un músculo. Sentía su estómago con esa sensación ya familiar que le avisaba sobre un pésimo día por delante.
Intentando calmar su malestar recapituló mentalmente los acontecimientos en los que participó durante la noche anterior.
Sonrió al recordar la cara de su mejor amiga cuando le entregó su regalo. Una fotografía con un marco de madera sin nada especial pero que mostraba a las dos chicas sonrientes durante un día en la playa -¿A esto le llamas regalo?- había dicho su amiga, pero Ana sabía que Kate era una loca por las cursilerías y que su regalo sería el favorito de la noche y que al día siguiente ocuparía un lugar en su velador junto a la cama.
Imágenes de Oscar hablándole de cerca le hizo sonrojar las mejillas. El delgado moreno llevaba siendo su compañero de clases durante los últimos 3 años y siempre había sido su favorito-amor-unilateral. Aunque en ocasiones tenía la sensación de que el chico le coqueteaba, nunca podría asegurar sus sospechas.
《Lo siento...》 y la imagen de unos ojos exquisitos comenzaron a pasar a toda velocidad.
- No, siempre algo termina jodiendome la noche - comentó despacio solo para ella y se decidió a sacar sus piernas de la cama.
Era un domingo caluroso y después de tomar dos pastillas para el dolor de cabeza y sin ser capaz de llevar nada a su estómago se dirigió a la casa de Kate. Le había prometido ayudar a ordenar el desastre al otro día y tenía en su celular 4 mensajes que se lo recordaban.
<Me debes una explicación!! Donde diablos te metiste anoche?>
< Amiga aún no despiertas??>
< Recuerda que tienes que traer tu trasero antes que lleguen mis padres>
< DA SEÑALES DE VIDA POR DIOS!!>
Antes de poder abrir el gran portón Kate apareció, dándole un susto y arrastrándola dentro.
- Tu y yo tenemos temas pendientes pero comenzaremos con este llamado “Sin evidencias” - Dijo su amiga señalando el campo de guerra en el que se había convertido el hermoso patio - y luego! No tienes idea lo que te tengo que contar.
- Ya, pero tus padres sabían de la fiesta ¿porqué tanto apuro? - dijo bajito porque con los chillidos de su amiga había sentido como una punzada le calaba la cabeza - y NO chilles me duele la cabeza como no te imaginas.
Se concentraron en sacar los vasos plásticos repartidos por todo el lugar y quitar los filtros de cigarro del césped.
- Pero… ¿Qué mierda? - Ana saco con la punta de los dedos un sosten que flotaba en la orilla del agua - A alguien se le enfriaron las niñas de regreso a casa - haciendo que su amiga riera por el comentario.
Tardaron más de 1 hora en arreglar todo a la velocidad que sus estados le permitieron. Ana solo se encargo de devolver el jardín a la normalidad mientras que Kate arreglaba el interior de la casa.
Cuando al fin terminaron, la nueva mayor de edad salió al patio con una bandeja pequeña y en ella dos vasos de jugo de naranja y dos sandwich de miga con jamón y queso. Tomaron asiento en el pasto junto a la piscina.
- El baño de mis padres estaba asqueroso - Le dijo a Ana con su cara de asco y acercandole un sandwich a su amiga - Alguien vomito y el asqueroso ni siquiera limpió la taza.
《Genial》
- Ay no, perdón, estaba ebria y lo olvidé - Dió un mordisco a su emparedado y notó como el hambre había regresado - Tuve un pequeño incidente en el baño - su amiga la miraba con ojos grandes y esperando a que continuara - pero primero cuéntame tu que es lo que tienes atorado desde que llegue.
-... Eres asquerosa - Colocó su espalda derecha y se preparó para el bombardeo - Ayer, cuando te desapareciste... por cierto Oscar pregunto por ti unas 100 veces. Llegó Victoria, ¿la recuerdas? La chica crespa del otro curso. Bueno, yo la invité y me preguntó si podía traer a su primo, y yo dije sí, sí claro - Tomó aire y continuó - La cosa es que ¡ANA era guapísimo!
- ¿Qué tan guapo?
- Cielos, es moreno, alto y tiene unos ojos que pareciera que te leyeran la mente - 《Díganme que esto es una broma》- Tendrías que haberlo visto
- Te vas morir pero creo que lo conocí - Su amiga espero - en el baño… vómito... fue patético.
- ¿TE ... te vió hacerlo? - Casi gritaba.
- Incluso me sujetó el cabello - 《¿Por qué tengo que seguir recordando esto?》-, me sobó la espalda y me vio con los calzones en las rodillas. Y sí, fue realmente horrible.
- ¿Qué... qué te dijo?
- Nada, ni siquiera hablamos, en realidad no lo recuerdo bien y era lo último que quería hacer hoy.
- Entonces lo que tengo que decir no te va a gustar nada - Una cara de compasión comenzó a aparecer en su rostro.
- Solo dime que después que me fui no se lo contó a nadie - Dijo en voz de suplica.
- ¿Qué? No, si ni siquiera sabía que lo habías hecho tu, es que Angel - 《Se llama Angel》 - Va a ser compañero de Victoria, lo que quiere decir que irá a nuestro liceo.
《Perfecto》 Ahora tendría que ver al chico, Angel, para recordarle todos los sucesos nuevamente.
Se sintió un auto llegar y las dos chicas miraron como se abría e ingresaba la camioneta del padre de Kate.
- Hola nenas - Saludo la madre con un beso en la coronilla a su hija - ¿Qué tal Ana? ¿Cómo estuvo la fiesta de anoche? - Dijo recorriendo con la vista el lugar.
- Hola Señora Albornoz. Todo bien, la pasamos de lujo.
- Me alegro - Miró a Kate y le dió la mano para ayudarle a ponerse en pie.
- Yo me iré a casa, tengo que ayudar a Cris con una tarea de matemáticas - Desordenó el cabello de su amiga - Luego te llamo.
- Por supuesto que me llamas, tenemos de que hablar aún.
Ana le guiñó un ojo y se dispuso a volver a casa.
- Adiós Señor - Se despidió del padre al pasar por su lado mientras éste cerraba la camioneta.
- Chao Ana, salúdame a tu padre - Ana respondió con un gesto de mano.
《Perfecto, ahora vamos a arruinarle la vida a Ana la gigante》
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